herrumbre de octubre

Se ha convertido en una suerte de costumbre anual. algo así como el Oktoberfest, pero infinitamente más personal. Cuando llega el otoño, saco el cd de October Rust y me lo llevo al carro para escucharlo sin parar. A todo volúmen voy y vengo, dejándome sumergir en la experiencia total de notas grises, melodías rojas, teclados mortuoriosos, graves con distorción condimentan el paisaje que se transforma día a día hasta el bullicio navideño de luces estridentes y cenas casi infinitas.
October Rust es la banda sonora de los días que se acortan, de las noches diáfanas, de las mañanas de neblina espesa; es una tentación al paganismo, un compañero más hasta la muerte.